Guayabo de Viernes 13

¡Uy! Buenos días. Como ya ni sé que hacer con el guayabo que traigo encima y ni me acordaba de que se trataba eso, hoy, después del viernes 13, 3 medias de ron, 1 aguardiente, 2 tragos de cerveza, dos vodkas y cero comida en la noche pueden imaginar la taquicardia que tengo, tiemblo más de lo normal (o sea que es un mal día pa' tomar fotos) y tengo que ir a trabajar, pero ya lo sé: uno se hace más viejo y cualquier cerveza, cada vez le sienta a uno más mal al otro día.
Pero para los que nos encontramos anoche, hace rato no había un viernes tan bien nutrido de gente que valga la pena en Carlos E. (a excepción de los hippies vendecosas, no mentiras dejémoslos en su paz): no! ustedes ya saben quienes son, estoy tan desalentada con esa revoltura de chorro que... bueno, sólo voy a decirles a todos los que cruzaron palabra conmigo que fue un buen viernes, cargado de voces arrastradas, gente sensata, muchos cigarros, bla, bla (hey! al fin encontramos el paquete de cigarrillos Royal de Byron y fuimos más felices de lo que ya estábamos), lo único que está mal es que se acabó el viernes 13, me llevaron a casa, comí, dormí y desperté y pasé a la pesadilla de guayabo por la que ando, hoy si que es un día de terror y mis ganas de coca cola, t.v y camita se vuelven un sueño imposible, cada vez más lejano, me va tocar esperar hasta por la noche, con este mareo y estas ganas de nada. Hombre todos sabemos lo buenos que resultan los viernes, mejores cuando son 13, pero como nada puede ser tan bueno en la vida, tenía que acabarse el viernes 13 y venir el sábado 14, amanecí con cara de no sé qué, ni dónde, ni nada, cuando fui a comprar cigarros esta mañana, en la tienda me lanzaron unas miradas extrañas, mi novio tan cariñoso me dijo: tenés cara de puta trasnochada, tan lindo... mi suegro me miraba con algo de risa y consideración, y termine por confirmar lo que estaba pensando: que estaba muy mal, tan mal como me veo ahora, que pena que sea tan obvio, en fin, todos sabemos que es un dia y tarde de terror... quizá debí seguir bebiendo, je, je, no estaría tan mal, mmm... no mentiras. Pero pasamos bueno anoche, eso cuenta más pa' la memoria que el guayabo, ya verán ese sí al rato se olvida.